TARTA DE GALLETAS CASERA

Holaaa, en esta ocasión os traigo una receta de mi madre, que seguro que comparte con otras madres más :-) Esta tarta la hice hace ya un tiempo, fue mi primera y tengo que comentaros que el resultado no es vistoso, más que nada porque estaba "sopa" cuando la hice, madrugué y todo, con el mérito que eso supone para mi XD y no llegó a cuajar lo necesario, pero ya he aprendido con la experiencia y las hago más bonitas, muestro el primer experimento para que veáis que aunque algo os quede feo, no por ello tiene que estar malo, y que de todo se aprende con la práctica ;-)

INGREDIENTES.

4 Cucharadas  grandes de chocolate a la taza.
2 cucharadas de azúcar.
4 vasos de leche entera.
1 sobre de natillas.
2 cucharaditas de maizena.
Aproximadamente 2 rulos de galletas, pueden ser doradas, hojaldradas, ... las que más os gusten.
1 cucharadita de café.
Agua.
1 chorrito o chorroteee XD de coñac o brandy.

ELABORACIÓN

En primer lugar forramos el molde para la tarta en papel de aluminio, más que nada para no ensuciarlo mucho y poder desmoldar con facilidad, así lo hace mi madre y yo sigo sus pasos cuidadosamente.

En un bol añadimos agua calentita, una cucharadita de café soluble  y otra de azúcar, además de un chorrito de brandy. Este mejunje será en el que bañemos a continuación cada galleta que coloquemos en el molde.
Por lo tanto, la base del molde deben ser galletas mojaditas y colocadas una al ladito de otra.

Nos vamos al fuego. 
En un cazo añadimos dos vasos de leche que calentamos y a continuación añadimos 4 cucharadas de chocolate a la taza y 2 cucharadas de azúcar; también una cucharadita de maizena para ayudar a que cuaje. Con la ayuda de una varilla estaremos mezclando el chocolate hasta que llegue a ebullición, vamos hasta que hierva.

Sobre las galletas vertemos parte del chocolate anterior, sin prisa, pero sin pausa. El resto lo reservamos en el cazo y lo tapamos con un plato para que conserve el calor y no cuaje antes de que terminemos de hacer la tarta.

En un bol mezclamos el sobre de natillas con un poco de leche calentita hasta diluirlo bien. En un cazo ponemos un vaso y medio (porque el otro medio está en el bol) de leche que calentamos junto con una cucharada de azúcar. El contenido del bol lo añadimos a la leche del cacillo, junto con un poco de maizena, para ayudar a que cuajen las natillas y movemos continuamente para que no salgan grumitos hasta llevarlo a ebullición.

Ahora sobre el chocolate volvemos a colocar otra capa de galletas que han sido previamente mojadas en café y coñac. A continuación añadimos parte de las natillas, otra capa de galletas, otra capa de  natillas de nuevo, galletas y por último chocolate... ¿por qué por último chocolate? porque me gusta que sea así jajaja.

Ya la tenemos lista y la dejamos reposar y enfríar. Una vez alcance una temperatura ambiente la podemos meter en el frigorífico. Hay que esperar a que tenga temperatura ambiente porque si la metemos en el frigorífico caliente, lo podríamos averiar.

Y ya está, lista para comer.
Por supuesto que cada cual puede variar los ingredientes a su antojo, en lugar de coñac le podéis añadir anís, o sin alcohol si es para niños, ... en fin. Es una idea sencilla y como os digo, rica.

Un besito.